Hay pocos cambios en la intención de voto con respecto a la medición anterior. Sigue liderando Castillo, sobre todo fuera de Lima. El voto blanco o nulo o la indecisión, no aumenta demasiado, y sigue representando un grupo importante. Quienes no eligen a un candidato suelen dar explicaciones de por qué escogen el blanco o nulo o su indecisión “¿Cómo será señorita?” contestan algunos y es que aún no lo han pensado, dicen que tienen miedo, sienten confusión o no creen que les convenga ninguno. Frente a ese panorama muchos están esperando ver más a los candidatos y tomar una decisión más adelante.
Por otro lado, 64% afirma que tiene el voto decidido y no cambiará de decisión, hay diferencia a favor de Castillo,pero es mínima. Lo que sí presenta más diferencias es el antivoto, de 47% con Fujimori y 35% con Castillo. Pese a los errores gruesos de Castillo y la campaña mediática en su contra, y pese a que Fujimori tiene una mejor estrategia de campaña, no lo sobrepasa.
¿A dónde irán los indecisos? El INEI acaba de presentar las cifras de pobreza de 2020, con un aumento en la pobreza monetaria, sobre todo en Lima y las zonas urbanas. Lo que está en juego en este momento es la crisis y una cultura política muy frágil, donde primarán las demandas de cambio y mejora de condiciones de vida, hacia allí podrían ir los indecisos. La preocupación por la pandemia no ha ocupado el primer lugar de los problemas identificados por los encuestados en abril, mucho menos los temas institucionales. La crisis económica golpea fuerte y no da mucho espacio para la política electoral.