Lee la columna de Carolina Trivelli, investigadora principal del IEP, para el diario El Comercio ► https://bit.ly/2Vvgt2w
Hemos estado hablando mucho de los jóvenes y de su capacidad de acción. Tienen una enorme fuerza transformadora, pero para usarla necesitan de apoyo y soporte. Confiar en que ellos podrán transformar las cosas solo con su esfuerzo personal es iluso; es más, es injusto. Más bien, debemos obligarnos a acompañar sus iniciativas, desde donde nos toque. Si nos sumamos, su fuerza se multiplica y sus posibilidades transformadoras también.
Hace una semana fue el desafío Kunan 2020, concurso de emprendimientos con impacto social y ambiental. Cada año, cientos de emprendedores sociales concursan en pos del soporte de una entidad que sobre todo les ofrece redes, aliados y amigos comprometidos con el desarrollo del ecosistema del emprendimiento social peruano. El desafío tuvo más de 300 postulantes y celebró su final con 10 finalistas y 10 finalistas adicionales de categorías especiales. Celebró además la aprobación de la Ley BIC, Ley de Sociedades de Beneficio e Interés Colectivo (¡gracias congresista De Belaunde!).
El ganador de este año, Recidar, liderado por Boris Gamarra, da cuenta justamente de cuanto importa el soporte en el éxito de un joven. Boris, de 33 años, estudio economía en San Marcos. Cuando terminó, trabajó en la banca y no le gustó. Se volvió reciclador. Con el apoyo de su familia emprendió, reciclando y segregando, y creó Recidar, un emprendimiento social que recoge donaciones de bienes usados –ropa, muebles, electrodomésticos, etc.–, los repara y luego los vende a precios módicos en sus locales para dignificar (y formalizar) la compraventa de artículos de segunda mano. Compite con la cachina, pero es formal, ofrece calidad, seguridad y sus productos son de origen conocido y trazable.
Boris ganó el Desafío Kunan 2020 por su tenacidad y trabajo, sin duda, pero también porque encontró y aprovechó en su camino la ayuda y soporte que necesitaba. Recidar y Boris han recibido apoyo de iniciativas como Protagonistas del Cambio, Mosaico, del propio Kunan (había llegado a la final antes), de familiares, amigos y colegas.
Recidar hoy es un emprendimiento sólido: tiene un directorio independiente, una estrategia de estandarización de procesos, una estrategia financiera detallada y sofisticada, un plan de relaciones públicas y una hoja de ruta para los próximos años que incluye planes de expansión a provincias. Todos estos instrumentos los han generado con ayuda de expertos que consiguieron gracias a varias redes de soporte. Boris cuenta con orgullo sobre las entidades y expertos en logística, tecnología, finanzas y relaciones públicas que lo vienen ayudando donándole tiempo, conocimientos y experiencia a cambio de ver (y ser parte de) un emprendimiento sólido y, sobre todo, con impacto social.
La historia de Boris y Recidar (pueden ver su web, y colaborar, tienen un servicio de primera) muestra cómo las redes de soporte, y la confianza de otros en ellos, son fundamentales para su éxito y para potenciar sus efectos positivos en la sociedad.
No le pidamos a los jóvenes que hagan todo solos. Ayudémoslos, confiemos, apostemos por ellos, para que sus proyectos tengan mejores oportunidades. Es por ellos, pero también por nosotros.