Nadine, honey is that you?
Oh, Nadine. Honey, is that you?
Seems like every time I see you,
You’re up to something new
Chuck Berry. Nadine
Nadine llega al distrito de Challhuahuacho, en Apurímac, la recibe un hombre con un cartel que reza “Challhuahuacho siempre existió antes de la mina. ¡Nunca más olvido!”. Se trata de una de las zonas más pobres del Perú ubicada a 15 minutos del proyecto minero Las Bambas, uno de los más importantes del país. Nadine llega en helicóptero, evocando aquellas épocas en las que el “Chino” hacía su aparición en el pueblo más recóndito, ese mismo que en las últimas elecciones le prestó su apoyo a Keiko. La actual Primera Dama, como antes lo hizo Alberto Fujimori, parece entender la importancia de hacer política en serio en el Perú. Si no tienes partido o aparato que haga sentir tu presencia de forma constante, no hay mejor contacto que aquel que se hace cara a cara, sin mediadores en los que no se puede confiar.
Nadine llega sola, sin Ollanta; pero eso no es un problema y acaso es una ventaja, pues no tiene que preocuparse de opacarlo. No llega con las manos vacías, trae consigo módulos de atención básica en salud y donaciones para que la población enfrente el friaje. La gente la rodea mientras camina, gritan su nombre. Quienes la conocen dicen que tiene un atractivo y magnetismo cautivador; quienes la conocen más dicen que ese magnetismo se triplica cuando está frente a las masas. Nadine, entonces, tiene un potencial que le es propio, y que no depende del todo del capital político de su esposo.
Las visitas de Nadine a localidades alejadas no se han detenido desde que empezó el gobierno, y probablemente no se detendrán, sino que se potenciarán. Tampoco menguará su importancia para la toma de decisiones dentro del gobierno, que desde ya parece ser mayor de la que se suele admitir. Nadie se le resiste, y mucho menos Ollanta.
¿Se necesitan más señas? Si crees que eres digno de adelantarte a su opinión, una palabra suya bastará para callarte. Hasta el martes Freddy Otárola y Marisol Espinoza blindaban al segundo vicepresidente Omar Chehade, luego de que una denuncia lo involucrara en supuesto tráfico de influencias. Hoy, miércoles, Nadine simplemente lanzó desde su twitter la frase “Tan difícil es caminar derecho??!!”. Enigmática como es, la frase bastó para que los parlamentarios prefirieran ser cautelosos y la firme defensa de ayer se convierta en duda hoy. Preguntados sobre su opinión en torno al “tweet”, todos piden una investigación y ninguno hace un amague de defensa.
La última encuesta de DATUM, publicada el viernes 14 de este mes, la ubica como el personaje con mayor aprobación pública luego del Presidente, 20 puntos por encima Keiko y 25 por encima de Alejandro Toledo. Tal vez el 2016 está muy lejos, y tal vez las condiciones no están dadas para una eventual victoria suya, como convincentemente ha argumentado Steven Levitsky en La República (1). En todo caso, parece que más interesante que preguntarnos cuán poderosa llegará a ser Nadine a partir de ese año, es preguntarnos cuán poderosa es hoy.
Fuente: Noticias SER.pe