El portal Inversión en la Infancia destaca los principales hallazgos que ofrece el documento de trabajo “La violencia infantil y el entorno doméstico: Puntos de partida para una propuesta de prevención en Huancavelica”, publicado por el IEP. A continuación reproducimos la nota.
El Instituto de Estudio Peruanos (IEP) presentó, el 28 de abril, el informe “La violencia infantil y el entorno doméstico: Puntos de partida para una propuesta de prevención en Huancavelica”. Este estudio, basado en las encuestas realizadas a 500 familias del distrito de Seclla, en la provincia de Angaraes, en la región Huancavelica, concluyó en que la violencia contra la infancia “es una práctica altamente aprobada por las madres como forma de corrección”.
De acuerdo a este estudio, presentado por dos de sus autoras, Patricia Ames y Úrsula Aldana, investigadoras principales del IEP, el 45 por ciento de las cuidadoras (madres, otras familiares) y en algunos casos los padres, están de acuerdo con el uso de la violencia física contra los niños como método de corrección, y el 73 por ciento está de acuerdo con el uso de la violencia psicológica. De las madres que señalaron que se debe corregir sólo hablando con el niño, el 48 por ciento terminó usando la violencia psicológica y el 32 por ciento la violencia física.
Patricia Ames comento que la violencia contra la infancia en este distrito de Huancavelica “es una práctica intergeneracional, ya que 9 de cada 10 madres la vivieron, motivo por el cual los padres no comprenden por qué esta práctica se debe sancionar”. Ames alertó que el 90 por ciento de cuidadoras sufrió violencia cuando fueron niñas. “Además, las autoridades encargadas de impartir justicia también vivieron este tipo de violencia”.
Por su parte, Úrsula Aldana afirmó que en nuestro país existe una cultura que legitima la violencia. “Los altos niveles de violencia contra la infancia en el distrito de Seclla se explicarían por patrones de crianza heredados. Muy pocas cuidadoras no fueron víctimas de violencia en sus hogares cuando fueron niñas Si bien la violencia física es menos aceptada, no es tan alta como la que recibieron los adultos cuando fueron niños”.
De acuerdo a este estudio del IEP, un aspecto que protege a los niños de la violencia es el uso adecuado de los espacios del hogar. Los resultados de las encuestas evidenciaron que un alto porcentaje de los adultos en el hogar dormían en la misma cama de los niños, lo que supone una potencial situación de riesgo.
En la próxima edición del Blog Inversión en la Infancia, amplia información sobre los resultados de este estudio.
Fuente: Inversión en la Infancia